Desde el inicio, Degú nació con el propósito de alimentar el alma y crear un espacio donde cada persona que cruce nuestra puerta se sienta como en casa. Con Feli al frente de la cocina y Pau en el servicio, hemos construido un rincón donde la calidez se sirve en cada plato y donde el cariño de una mesa familiar se refleja en cada detalle.

Más allá del restaurante, Degú es una comunidad. Nos mueve el deseo de hacer el bien, de impulsar a mujeres cocineras, de apoyar causas sociales y de ser un punto de encuentro donde la comida une, reconforta y celebra la vida.

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Porque en Degú, cada bocado es un regreso a casa.